En esta edición de ‘Conversando con Correa’, Roger Waters, co-fundador de la mítica banda de Rock progresivo Pink Floyd, comenta diferentes aspectos de un mundo que percibe como distópico, en el que la verdad se ha convertido en un punto de vista extremo. Sus opiniones sobre la sociedad estadounidense, el perfil « neofascista » de varios mandatarios mundiales y la fuerte opresión que sufre cualquier iniciativa izquierdista en América Latina son solo algunos puntos destacados en su análisis.
La conversación entre el célebre bajista y compositor Roger Waters y Rafael Correa tiene un punto de partida inmediato, por sencilla proximidad con la vida del músico. Confinado a unos 150 kilómetros de Nueva York, comenta el desastre provocado por el coronavirus: « En Nueva York ha sido terrible, aunque era previsible, porque no hay sistema sanitario en EE.UU. Bueno, hay un sistema sanitario, pero es solo para los muy ricos y en consecuencia no está preparado en absoluto para afrontar algo así« , opina.
En este confinamiento, el artista se mantiene relativamente aislado de las corrientes informativas dominantes: « Ni se me ocurriría abrir el New York Times o el Washington Post, o ver la CNN o la MSNBC o ningún otro de los canales sin sentido que se emiten en EE.UU.« , asegura Waters. Correa comenta que, efectivamente, « el sistema sanitario en Estados Unidos es terrible, horroroso », además de ser « la principal razón por la que la clase media está arruinada ».
Roger Waters a Correa: « Quienquiera que gobierne EE.UU., que son oligarcas y plutócratas, no tiene ningún interés en las libertades ni en la libertad »
Tras un conciso intercambio de ideas sobre el contraste entre el verdadero modelo de vida estadounidense y los grandes valores en los que teóricamente está basado, Waters concluirá que « resulta obvio que quienquiera que gobierne este país —que son un puñado de oligarcas y plutócratas— no tiene ningún interés en las libertades; ni en la libertad, ni en los derechos humanos ni en la democracia ».
En EE.UU. gobiernan oligarcas y plutócratas, no tienen ningún interés en las libertades ni en la libertad
Una mirada sobre América Latina y sobre la defensa de la verdad
En un momento de la conversación, en medio de una reflexión sobre la política exterior estadounidense, Waters menciona la realidad política de Ecuador: « No dejo de pensar en usted y en Lenín Moreno », le dice a Correa, enfatizando la idea de que el actual presidente ecuatoriano « ha jodido por completo al país ».
Tenemos que ser extremistas, porque la verdad parece ser un punto de vista extremo aunque no lo sea: solo es la verdad
« Para las élites latinoamericanas la democracia solo es válida mientras no cambie nada. La democracia es un peligro si puede cambiar algo« , responde Correa, que asegura desde su propia experiencia que « es muy difícil cambiar las cosas, porque enseguida te acusan de ser un líder autoritario y antidemocrático ». El expresidente de Ecuador recuerda en este sentido que las élites de la región « controlan los medios y pueden imponer cualquier opinión« .
Es en este punto de la charla donde Roger Waters señala el aspecto distópico del mundo contemporáneo, citando incluso a George Orwell y a Aldous Huxley, para acabar defendiendo la figura de Julian Assange, « un periodista honrado que estaba revelando las maldades que cometía el gobierno« .
« No me importa que me acusen de extremismo: tenemos que ser extremistas, es muy importante, porque la verdad parece ser un punto de vista extremo aunque no lo sea; solo es la verdad », razona a continuación.
Necesitamos educación, lo que no necesitamos es propaganda
Roger Waters amplía entonces el campo de su reflexión: « Los puntos de vista realmente extremos son los de Lenín Moreno y Donald Trump, o los de Duque Márquez en Colombia, o los de Bolsonaro o los del primer ministro de Hungría, Orbán », defiende el músico, que define a estos mandatarios como « líderes neofascistas que actúan totalmente a instancias de las estructuras de poder oligárquicas que en verdad poseen y controlan todo ».
Esperanza y confianza en el compromiso
El propio Waters ofrece un contrapunto optimista a esta visión distópica del presente. En su opinión, « la resistencia a esa hegemonía se hace cada vez más habitual y está ganando cada vez más apoyo ». « Cuando el virus se acabe –advierte–, esos chicos volverán a salir a las calles de Santiago de Chile, volverán a las calles de Ecuador, en particular después de todo lo que ha pasado en Ecuador: me refiero a Lenín Moreno sacando bonos del país para sus amigos ricos de Estados Unidos, es asqueroso ».
Correa recuerda entonces los problemas y dificultades que enfrentan quienes sostienen un compromiso político. Sin ir más lejos, señala que al propio Waters « lohan demandado, y eso le ha costado varios millones de dólares de patrocinio ». « Créame, han intentado destruirme por todos los medios posibles« , repone el co-fundador de Pink Floyd.
Correa recuerda entonces uno de los versos más célebres de la banda: « We don´t need no education » (‘No necesitamos ninguna educación’), del ya legendario tema ‘Another Brick in the Wall’. Hoy, Waters introduce un matiz fundamental en el mensaje: « Me alegro de poder decir que su significado literal real es que sí necesitamos educación. Lo que no necesitamos es propaganda. Necesitamos educación y no propaganda. Hay una gran diferencia », concluye.